Káiser

El gran monstruo pardo se ha adaptado estupendamente a ooooootro cambio más para él. En la nueva casa está encantado de la vida, tanto es así que pasa el tiempo revolcándose por sus lugares favoritos ente todo el espacio que tiene para él.

En la casa tenemos un nuevo inquilino que se llama Boby.

El nuevo inquilino ha tomado a Káiser como su hermano mayor y lo imita en casi todo lo que hace. Si fueran hembras tendrían el periodo juntas jeje.

Tienen las mismas aficiones a distinta escala.

A Káiser le hemos montado un circuito para que tenga espacio para moverse cuando lo dejamos atado (por la noche y cuando no estamos, porque todavía no me fio de dejarlo suelto en esas circunstancias, aunque llegará el momento seguro).

Los perros vecinos se acercaban al principio a imponer una jerarquía en la que ellos mandaban, hasta que vieron el tamaño de la bestia parda y decidieron que intentarlo pa na es tontería, que si hay que intentarlo se intenta, si no es por no hacerlo, pero que intentarlo pa na... Los más rezagados decían, tu ve haciendo hueco, que si eso yoo yaa, yooo ya... De vez en cuando algún despistado se pasea por el terreno y Káiser se lo queda en mirando, con su postura de recorte en silueta, en plan "ladra y grúñeme si tienes huevos, que te viá corré vivo a varazo limpio". Cuando el despistado se da cuenta, corre de allí como si la vida le fuera en ello. Me he dado cuenta que algunas veces algún que otro perro perseguido por los de los vecinos, huye hasta al terreno de nuestra casa y cuando los abusones ven al monstruo pardo, se les quita las ganas de perseguir cosas rápidamente, quedando la pobre víctima, que huía de ellos, libre como el viento dando brincos por el césped, asomándo las patitas por encima de éste, con cada salto. De esta manera pasan mis días de Félix Rodríguez de la Fuente: (Leer con con de Félix) "El monstruo pardo ibérico, se pone en pié sigilosamente, adoptando su postura amenazante de recorte en silueta, sin perder de vista al can común que ha osado entrar en su hábitat".

Como habéis mal visto en las fotos, el monstrenco tiene espacio para reventar de placer mientras corre por la pelota o se revuelca como un cochino en el barro harto de comer bellotas como un cerdo jaja. Yo creo que cuando esta suelto (de 7 de la mañana a 18) no se larga por ahí porque le da pereza irse tan lejos. Si, habéis leído bien, me levanto a las 7 y a las 23:00 me acuesto muerto de sueño, quién me lo iba a decir hace dos meses... Jaja. Lo mejor es que me levanto sin despertador, porque tengo un nuevo prototipo de alarma natural que se llama Boby, que me despierta pidiendo salir a mear, cagar y a que le de de comer.

Lo único que no lleva bien es la tormenta. Cuando hay rayos, pasa del monstruo pardo, a la super cagona parda. No se quiere meter ni en la caseta. Todas las arrugas de la cara se levan de lo que retrasa las orejas para poner cara de miedo, parece que ha ido al cirujano plástico. Menos mal que los otros perros también están resguardados de la lluvia, que si no perdería todo el respeto que le tienen. Sin embargo el pequeño pardo, se queda tan tranquilo, como el que oye llover (nunca mejor dicho :p).

Video de regalo: http://www.youtube.com/watch?v=TIC8wn3gdXc

Y nada, hasta aquí la actualidad informativa sobre la pequeña manada.